Cartas desde Paris: Julieta Lerman traduce a Claude Esteban/ En la memoria de los otros nuestras heridas se curan siempre


Hoy domingo, día de recorridas y cavilaciones, recibimos noticias desde Paris.
Julieta Lerman nos avisa que en No retornable, se publica una selección de los poemas que traduce mientras vive en Paris.
El libro es Restos de cielo, casi nada (Morceaux de ciel, presque rien) de Claude Esteban (París, 1935-2006), Gallimard, 2001 y cuya traducción completa será publicada próximamente en Bajo la luna
Uno de los poemas de Claude Esteban nos resulta imprescindible: “En la memoria de los otros, nuestras heridas se curan siempre”.

Nos enteramos del libro y de la vida del poeta y su obra: Poeta, traductor y ensayista francés, hijo de un exilado español, publicó, entre otros Conjoncture du corps et du jardin (Flammarion, 1983, Premio de la Academia Mallarmé), Morceaux de ciel, presque rien (Gallimard, 2001, Premio Goncourt de Poesía), Quelqu'un commence à parler dans une chambre (Flammarion, 1995), Soleil dans une pièce vide (Flammarion, 1991, premio France Culture) entre otros. En 1997 la Societé des Gens de Lettres le otorgó el Gran Premio de poesía por el conjunto de su obra.

La selección completa en

Aquí los que más nos gustaron:

::::::::

En la memoria de los otros
nuestras heridas
se curan siempre.


Dans la mémoire des autres
nos blessures
guérissent toujours.

Es tan fácil
morir,
quiero envejecer como un árbol.



C'est si facile
de mourir,
je veux qu'on viellisse comme un arbre.

::::::


Yo no bajaba más
a la playa

el mar que te arrancó
me abandonaba

una flor azul
brotó en la arena

y eras tú
y respirabas.

*


Je ne descendais plus
vers la plage

la mer qui t’avait prise
m’abandonnait

une fleure bleue
avait poussé dans le sable

et c’était toi toujours
et tu respirais.

:::::

Dejen dormir a los dioses
bajo sus piedras,
sólo hablan con serpientes.

*

Ese rumor es quizás
una estrella
caída en el pasto.




Laissez dormir les dieux
sous leurs pierres,
ççils ne parlent qu’aux serpents.
*

Cette rumeur, c’est peut-être
une étoile
tombée dans l’herbe.
::::::


Mi amiga
está vestida de brezo
tendrá frío este invierno.

*

Conté siete gotas de lluvia
en un pétalo,
siete buenos pensamientos.



Mon amie
a des robes de bruyère,
elle aura froid cet hiver.

*

J’ai compté sept gouttes de pluie
sur un pétale,
sept bonnes pensées.

:::::::

Julieta Lerman (Buenos Aires, 1980) publicó París intramuros en el sello editorial El Surí Porfiado en 2008 y la plaqueta El diario de Emma (Color Pastel, 2010). Poemas suyos integran la antología Rupturas y desafíos de la nueva poesía argentina y ecuatoriana (Quito, 2010), Poesía Manuscrita 3 (Buenos Aires 2010) y Festival del Norte Grande (Salta, 2008). 

Gracias Julieta!

Aquí algunos de sus poemas:

:::::

Cuando llego ordeno la ropa
apilo los libros las postales mis cositas
en el placard provisorio es
como seguir de viaje.
Pero después pasan los días las semanas
y todo está en el mismo lugar
todo
yo tampoco puedo moverme
el ruido de la ducha me moja
la herida de cuando nos bañábamos juntos

:::::::

Se interrumpe la charla debajo nuestro
hay un lugar que cada uno
llena de silencio y se acuesta a dormir.
Y en sueños tenemos
un diálogo incomprensible
soñamos juntos
con cosas separadas
yo sueño con un bote en un río
que da al mar y vos
soñás con una caja
adentro de otra caja estoy rodeada
por estas cuatro paredes de cartón
que avanzan

:::::::

La luna está tan lejos y nosotros
pobres mortales entre piedras cabizbajos
siempre tenemos frío.
No se puede confiar en las palabras, se dan vuelta
como los barquitos de juguete en la fuente de la plaza
quedan flotando panza arriba como atónitos
en un día radiante
el agua los mueve apenas
aunque no están amarrados
a ningún lugar

::::::

Donde comienza el hombre
en aquel hombre
Joao Cabral de Melo Neto

Donde comienza el hombre
en aquel hombre el musgo se vuelve más frondoso,
unos pastos desalineados se extienden por rutas desconocidas,
se bifurcan
en los libros que leí

donde comienza el hombre
en aquel hombre es de noche, una música a lo lejos
se enreda con el silencio de mis sábanas se alargan
como una alfombra muda
bajo sus pies

donde comienza el hombre
en aquel hombre despierta una mujer de agua
que coincide a veces conmigo

donde comienza el hombre
en aquella mujer hay un poema
doblado cien veces, minúsculo
en el rincón secreto de los días que pasan

::::::

Comentarios

  1. Merce, una hermosura el poema de Claude Esteban,en francés y la traducción... gracias por traerlos, una vez más, un fresco paseo al interior.
    Y tus fotos son tan enigmáticas... veo el helecho de la portada ¿entre micro-burbujas??? un clima especial, también la espuma de ese mar.
    besos

    ResponderEliminar
  2. Vale, gracias a vos por estar, pasar por aquí y detenerte. La maravilla y el misterio está en la naturaleza, las fotos son en tanto estamos y vemos aquello que ella nos ofrece. Ese mar, es un mar muy tuyo y lo has buceado, es la playita de las cujas, una tarde en la que el paisaje se trastornó y fue entre lunar y arrebato marino, como me dijo una amiga.

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